CASTRILLÓN: TRES LIBROS
Umberto Senegal
Si mediante recapitulada
imbricación diegético sociosemiótica de sus tres recientes libros, Dionisio Aymará: El asombro y la agonía
(2014); Palabras reincidentes (2014); Obra poética: Julio Alfonso Cáceres
(2014), yo aprovechara para esta glosa vocablos de la Tabla de
conceptualización literaria diseñada por Castrillón, a partir de la tabla de conceptualización
creativa de Broughton, Carlos Alberto sería el copartícipe primero de mi sardónico
juego; el segundo, otro Carlos Alberto: el narrador y caricatógrafo Villegas
Uribe; y el tercero, un Carlos Alberto más: el poeta Agudelo Arcila. Tales libros
denotan su eminente categoría de estudioso y crítico con ilustrada visión para valuar
el devenir literario de nuestra región y otros territorios de Colombia y del
mundo. Los enfoques lingüísticos de sus juicios, sustentados en el estudio
sincrónico de la literatura; su raciocinio literario, como ocurre con el ensayo
previo a la compilación de los cuatro poemarios de Cáceres; la metódica ecuanimidad para examinar un texto
en prosa o verso desde autorizados puntos de vista de la pragmática, convalidando
sus dictámenes en marcos referenciales concretos, según se observa en su
estudio sobre el poeta venezolano Dionisio Aymará, con quien Castrillón cruzó
correspondencia, apuntalado en teorías propias del sistema metafórico de Lakoff
y Johnson, le dan valía literaria. “El
aislamiento del poeta y su desdén por las expresiones nuevas, han hecho difícil
que se reconozca su labor dentro de la tradición a la que por estética y
tiempo pertenecería”, aclara
Castrillón, expandiendo el ensayo que sobre dicho poeta incluye en Palabras reincidentes, al lado de metódicos estudios sobre los haikus de
David Lanoue; la fractalidad en los microrrelatos de Daniil Harms; Ortega y
Gasset proponiéndose leer a España desde el Quijote; la metáfora del viaje en
la poesía de Alba Lucía Ángel; el ensayo sobre la obra y vida de Reinaldo
Arenas, fundamental para quienes investiguen las novelas y cuentos del narrador
cubano; y Domitila Barrios, una de las cinco mujeres que abatieron la dictadura
del general Hugo Banzer. En el Quindío, lo evidencian estos tres libros junto
con otros de investigaciones preliminares, las indagaciones críticas de Carlos
Alberto son referentes inexcusables para conocer, entender y juzgar tanto la
producción individual de escritores regionales, como la evolución socioliteraria
de aquellos mecanismos lingüísticos configuradores del mapa literario regional.
Aymará, Cáceres y el heterogéneo conjunto de escritores relacionados en sus
libros, no son piezas sueltas de la perspectiva de Castrillón sobre la
literatura y sus compromisos con la sociedad, la palabra y la belleza. Por el contrario,
tal quehacer intelectual es constante búsqueda, desde la academia o a partir de
su introspectiva experiencia lectora, de la configuración cronotópica
desacralizante, proteica y receptiva, testimonial o teorética, del trabajo que cumplen
los escritores actuales y que realizaron cuantos nos precedieron con sus libros.
Interesante reseña que invita a leer al amigo Castrillon. Muchas gracias.
ResponderEliminarInteresante reseña que invita a leer al amigo Castrillon. Muchas gracias.
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